Nota publicada en diferentes medios de comunicacion social en el mes de Mayo 2009
Foro de Consulta para la Regulación de las Casas de Empeño en Quintana Roo
La propuesta de Ley para la Regulación de las Casas de Empeño en Quintana Roo, obedece a los requerimientos que hoy en día existen en este estado, en el cual se encuentra operando el 10 por ciento de la totalidad de este tipo de negocios en todo el país. Los nuevos tiempos exigen compromiso por parte de los legisladores, para garantizar el bien común y la justicia social. Ojala y los diputados que integran la XII Legislatura del Estado no se sientan intimidados por el ataque del que ha sido objeto esta iniciativa de ley por parte de quienes tienen en su poder más de 50 casas de empeño, y dos medios de comunicación, a través de los cuales, con todo cinismo, se han atrevido a tergiversar todo lo relacionado con el resultado de los foros de consulta.

Por José Ynes Peraza Azueta

Bastante nutridos y llenos de participación ciudadana, resultaron los foros de consulta para la regulación de las casas de empeño en el estado de Quintana Roo. Éstos fueron realizados por la Comisión de Industria, Comercio y Seguridad Social de la XII Legislatura del Congreso del Estado en los municipios de Benito Juárez, Solidaridad y Othón P. Blanco los días 13, 14 y 15 del mes de abril de 2009.
Los foros de consulta ciudadana fueron confeccionados con la finalidad de conocer la opinión ciudadana respecto a este giro comercial, de carácter especulativo y lucrativo. Y por otra parte, conocer de viva voz, lo que en su defensa o a favor tenían que decir los dueños de las denominadas casas de empeño.
La participación fue por demás entusiasta, aleccionadora y ejemplar. Fue muy enriquecedora en materia de comentarios, propuestas y reflexiones tanto en calidad como en cantidad.
En términos generales, el resultado de los foros realizados hasta el momento en los lugares ya mencionados, muestra que existe un consenso generalizado en favor de la aprobación de la Ley para la Regulación de las Casas de empeño.
Muy positivo, y de suma importancia puede catalogarse el echo de que tanto usuarios como prestadores de este tipo de servicios coincidieran en lo necesario que es contar con una ley regulatoria en el estado para proteger a ambas partes, por un lado a los usuarios o pignorantes, y por otra parte al empresario.
Al empresario para garantizar que su capital esté protegido y trabajando dentro de los rangos de la legalidad. Al pignorante para que no sea presa fácil e indefensa de quienes, aprovechando sus necesidades crediticias, lo explotan a más no poder, amasando así, grandes fortunas.
Sin duda los resultados de los foros de consulta arrojaron como consenso la opinión generalizada por parte de todos los presentes, en el sentido de que el surgimiento de la ley para la regulación de las casas de empeño es una necesidad imperiosa en el estado de Quintana Roo.
Desde luego que las reflexiones, ponencias y propuestas fueron muy precisas y directas, mencionarlas todas sería irrelevante, pues estoy seguro que todas serán contempladas dentro de la ley promovida por el diputado Gustavo García Bradley.
También fue tanta la información positiva vertida en los foros de consulta ciudadana, que por el momento es mejor no abordar temas que podrían despertar polémica, con la finalidad de no contaminar el ambiente, deteniéndonos en cuestiones particulares como fueron los señalamientos precisos y concisos que en su momento se hicieron los representantes de las casas de empeño y los usuarios de las mismas.
En términos generales, si los diputados se alimentan y nutren de los resultados que arrojaron los foros de consulta, podrán obtener los elementos necesarios y suficientes para agilizar la aprobación de la ley para la regulación de las casa de empeño, situación, que en este momento es muy saludable que así sea.
De ser así podríamos decir que muy pronto Quintana Roo se sumará a los otros estados de la república mexicana como son Baja California, Tamaulipas, Coahuila, Chiapas, Tabasco y Sonora, que ya cuentan con ese tipo de ley e incluso nos estaríamos adelantando al esquema nacional donde muy pronto, con toda seguridad, esta ley vera la luz del día, ya que tanto en la cámara federal de diputados como de senadores, se encuentran ya las respectivas iniciativas para considerar a las casas de empeño como entidades financieras de asistencia social, auxiliares de crédito para las clases bajas, y ya no como empresas con actividades comerciales sobre las que no se pueden fijar topes máximos a las tasas de interés.
El interés generalizado de que esa nueva ley sea aprobada por los diputados de la XII Legislatura local, representa una coyuntura que debe ser aprovechada, ya que si la aprobación de la misma se pospusiese, para que sea aprobada hasta fin de año, en el siguiente periodo de sesiones del Congreso del Estado, esa situación ocasionaría que los dueños de las casas de empeño se vieran afectados, ya que cuando se apresten a tramitar sus licencias de funcionamiento en el próximo año, se encontrarán con el panorama nada halagador que les exigirá la nueva tramitologia que tendrían que cubrir para poder operar con normalidad el giro comercial al cual están dedicados.
Por lo que, como sería de esperarse recurrirán a la presión, el chantaje y la extorsión, a fin de pedir tregua y plazos que les permitan cumplir con la normatividad que la nueva figura jurídica les exigirá.
Desde luego que van a existir casas de empeño que no van a poder cumplir con los requisitos que el nuevo ordenamiento jurídico exigirá, porque su actividad (función) oscila más en el lucro, en la actividad desmesurada de la usura y en la compra de objetos robados. Esos que bien podríamos calificar como empresarios oportunistas, fueron exhibidos en los foros de consulta, por los dueños y representantes de las casas de empeño legalmente establecidas hasta el momento.
En Solidaridad el Sr. Alberto Millar López expuso que por culpa de vivales que lucran y roban a la gente, la buena labor que vienen realizando quienes si son honestos y realizan su actividad empresarial con espíritu de servicio social a la comunidad, se ven severamente afectados, porque los empresarios voraces generan un ambiente de duda e incertidumbre.
Pues bien amigos y amigas lectores, si todo sigue su curso normal, la ley para la regulación de las casas de empeño en Quintana Roo pronto será aprobada. Situación que permitirá mayor protección para quienes forman parte del padrón clientelar de esos giros comerciales.
Sin duda alguna esperemos que todo esto funcione, y que el espíritu creador y transformador de quienes creen que podemos fabricar hoy el mundo en el que viviremos mañana, se vea plasmado en una nueva realidad, que con toda certeza, todas aquellas personas que se verán beneficiadas, mucho se lo van a agradecer a los diputados que integran la XII Legislatura.
No hay que olvidar que en la vida todo cambia. Un ejemplo es la propuesta de una nueva ley, misma que hace 6 o 10 años no se hubiese justificado en lo más mínimo, ya que en Quintana Roo no existía una sola. Pero a la fecha contamos con mas de 287 casas de empeño, según los datos oficiales, sin contar desde luego a las casas que no están registradas lícitamente, y que con toda seguridad funcionan sin mayores complicaciones en la clandestinidad, amparadas por la corrupción, los favores y la impunidad.
Ojala y los diputados que integran la XII Legislatura del Estado no se sientan intimidados por el ataque del que ha sido objeto esta iniciativa de ley por parte de quienes tienen en su poder más de 50 casas de empeño, y dos medios de comunicación, a través de los cuales, con todo cinismo, se han atrevido a tergiversar todo lo relacionado con el resultado de los foros de consulta.
Por lo visto olvidan que, la actividad que realizan, es próspera gracias al mercado que ellos tienen cautivo, y que la anarquía a través de la cual realizan su actividad de lucro tarde o temprano será regulada en el estado, les guste y les parezca o no. Por lo pronto la carne ya esta en el asador. Veremos que es lo que se cuece de todo esto.
Chetumal Quintana Roo mayo de 2009